Una viejita pierde sus llaves en el parque. En ves de regresarlas un hombre alto aprovecha que la viejita es pequeña de estatura y la humilla haciéndola saltar por la llaves. Un policía se presenta pero a él también no se las. Afortunadamente esta anciana tiene más de un truco en su bolso, ella le mete un gran patada en los cojones.